07 de Abril, 2024
Radio Mercosur
Mundo

CRECEN LAS EXPORTACIONES DE AMERICA LATINA Y EL CARIBE HACIA CHINA

China sigue trepando en comercio regional. Ventas al gigante asiático crecen 3 veces más que el resto.

Responsive image
AMERICA LATINA - China sigue agigantando su posición como gran socio económico de América Latina y el Caribe. La llegada a la Casa Blanca de Donald Trump, un presidente abiertamente contrario al libre comercio y la multilateralidad, ha sido el empujón definitivo para el avance de Pekín. Pero los lazos comerciales y de inversión llevan más de una década tejiéndose. Las últimas cifras apuntan en esa dirección: en 2017, las exportaciones de la región al gigante asiático se dispararon 30%, según el BID. El crecimiento de los envíos a China triplicó en el último año al de las ventas a EE.UU.
 
 
Las exportaciones de Latinoamérica y Caribe a todos los mercados mundiales crecieron 13%, revirtiendo así el descenso de 3,3% registrado en 2016: un notable cambio de tendencia todavía pendiente de consolidación y guiado, sobre todo, por el encarecimiento de las materias primas, en las que la región sigue siendo intensiva. La OMC prevé que los intercambios globales crezcan algo menos de un 4% a cierre de 2017, la tercera parte que el crecimiento de las exportaciones con origen en América Latina.
 
El petróleo, producto básico por excelencia y del que muchos países latinoamericanos, como Venezuela, Brasil o México, son exportadores netos, incrementó su precio en más de 23% en los 11 primeros meses del año. El hierro, por su parte, vale hoy casi 27% más que hace un año: un auténtico revulsivo para Brasil, el segundo mayor productor mundial de este mineral. Y el precio del cobre, del que tanto depende Chile, repuntó 28%.
 
 
Las buenas noticias, sin embargo, no llegan a todos los rincones de la región. El auge exportador se concentra en América del Sur, donde el crecimiento medio fue del 16%, frente a la caída del 4,5% registrada en 2016 y, muy especialmente, en cinco países: Venezuela (28%), Perú (25%), Colombia (19%), Brasil (18%) y Ecuador (16%). Todos ellos tienen dos denominadores comunes: la importancia de las materias primas sobre el total de sus exportaciones y su alta dependencia de China.
 
Con la recuperación en una fase "aún relativamente frágil", para que las ventas exteriores latinoamericanas continúen la tendencia alcista registrada este año el BID ve clave que se "despeje la incertidumbre sobre el crecimiento de China". También que la propia economía latinoamericana acelere definitivamente. Y que lleguen a buen puerto dos negociaciones: las de EE UU, México y Canadá para la actualización del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLC), y las de Mercosur y México con la Unión Europea para, respectivamente, pergeñar y modernizar sus respectivos acuerdos comerciales.
 
El primero de estos asuntos —la salud económica de China— y el último —el futuro del TLC— se presumen esenciales para los sectores externos de América del Sur y México. Y ahí, la suerte también es dispar: mientras las dudas sobre el futuro del gigante asiático se han disipado a golpe de estímulos fiscales y monetarios —si bien la incertidumbre sobre la ingente deuda privada permanece—, la zozobra sobre el tratado norteamericano no ha dejado de crecer en los últimos meses, siempre bajo la amenaza de ruptura de Trump. De China dependen uno de cada cinco dólares exportados por Brasil y uno de cada cuatro exportados por Perú el año pasado. Y de sus dos socios en el TLC, EE UU y Canadá, penden el 80% de las ventas exteriores de México.
 
Los flujos intrarregionales —los que se producen entre países latinoamericanos o caribeños— siguen siendo una de las grandes asignaturas pendientes de una zona que mira demasiado a China, a EE UU y, en menor medida, a Europa, y muy poco a sus vecinos más inmediatos. Sin embargo, en ese punto, los datos también permiten una lectura optimista. Al menos, en el corto plazo: las exportaciones intralatinoamericanas aumentaron 12% frente a 2016.
 
 
Fuente: EL PAIS - MADRID - ESPAÑA

Lunes, 08 Enero 2018