El BID otorgará a Argentina cerca de US$4.000 millones en créditos
Los fondos serán distribuidos entre distintas iniciativas del sector público y privado
El presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Ilan Goldfajn, anunció que se otorgarán a Argentina US$3.800 millones en créditos, distribuidos entre el sector público y privado en un periodo de dos años. Este financiamiento incluye una inyección de US$2.400 millones para el sector público, que se completará este año, y US$1.400 millones destinados a proyectos privados en los próximos dos años.
Goldfajn detalló que los fondos para el sector público se utilizarán para mejorar la eficiencia del gasto, cubrir subsidios energéticos y fortalecer la protección social. Por otro lado, los créditos para el sector privado se enfocarán en 20 proyectos en áreas como agronegocios, infraestructura, energía y minería, incluyendo tres iniciativas relacionadas con el litio.
En un artículo publicado en el Financial Times, Goldfajn subrayó los progresos del Gobierno argentino bajo la administración de Javier Milei y destacó la importancia de una colaboración efectiva entre los sectores público y privado para atraer inversiones y superar las recurrentes crisis económicas del país. Mencionó que el equilibrio fiscal ha mejorado notablemente, pasando de un déficit del 2,9% del PBI a un superávit del 1,5% en solo siete meses.
El presidente del BID enfatizó la necesidad de continuar optimizando el gasto público y reafirmó que hasta un 7% del PBI podría ser reasignado para beneficiar a los ciudadanos más vulnerables. Destacó que su organización está colaborando estrechamente con el Gobierno para mejorar la eficiencia del gasto y fortalecer la protección social, aunque advirtió que esto es solo una parte del proceso necesario para lograr un crecimiento sostenible.
Goldfajn concluyó que la transformación económica de Argentina dependerá de un sector privado dinámico que genere empleo y un sector público que brinde una regulación adecuada y protección social robusta, creando así un ciclo de estabilidad y crecimiento a largo plazo. Además, valoró los esfuerzos del Gobierno para desregular diversos sectores, lo que podría fomentar un entorno de negocios más atractivo y estimular las inversiones.
Redacción