Avances en las negociaciones entre Mercosur y EFTA
Las conversaciones entre Mercosur y la Asociación Europea de Libre Comercio están progresando, y un informe sugiere que un acuerdo podrÃa potenciar las exportaciones argentinas

El año 2024 cerró con un notable récord de exportaciones desde Argentina hacia el bloque de la Asociación Europea de Libre Comercio (EFTA), que incluye a Suiza, Noruega, Islandia y Liechtenstein. Este bloque se ha consolidado como un socio clave para el país sudamericano, destacándose como el quinto mayor inversor extranjero en Argentina. Un informe elaborado por los analistas Guido D’Angelo y Emilce Terré de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) subraya el potencial que un acuerdo de libre comercio podría tener para fortalecer aún más las relaciones bilaterales.
A pesar de no ser parte de la Unión Europea, los países que conforman el EFTA poseen un alto PIB per cápita y han mantenido lazos comerciales estrechos con el bloque europeo. Desde la creación del Espacio Económico Europeo en 1994, el EFTA ha integrado a varios miembros de la UE, exceptuando a Suiza, que ha optado por acuerdos bilaterales independientes. Este contexto favorece a Argentina, que busca diversificar sus mercados.
En el marco de las negociaciones del Acuerdo de Asociación Mercosur-UE, que se cerró en 2019, el acuerdo con el EFTA también fue firmado en agosto de ese mismo año. Mientras las conversaciones con la Unión Europea continúan, las tratativas con el EFTA han avanzado significativamente, destacándose recientemente una reunión entre los cancilleres de Paraguay y Suiza, donde se mencionó que las negociaciones están “muy avanzadas”.
Durante el año 2024, Argentina alcanzó un récord de exportaciones hacia los países del EFTA, con Suiza emergiendo como el principal destino. Este país se ha convertido en el mayor comprador de oro argentino, concentrando casi el 37% de las ventas externas mineras de Argentina, y registrando un aumento del 50% en el valor de exportación de este mineral. Además, Argentina abastece aproximadamente el 14% de las importaciones de plata de Suiza, lo que refleja la importancia del sector minero en las relaciones comerciales.
El EFTA se ha posicionado como un actor relevante en el panorama económico argentino, con inversiones que superan los 8.600 millones de dólares a mediados de 2024. Suiza representa el 94% de estas inversiones, que abarcan desde la industria alimentaria hasta el sector de la joyería. Sin embargo, aunque la minería es un componente clave, los bienes agroindustriales se perfilan como los sectores más dinámicos y con mayor potencial de crecimiento hacia el EFTA.
El acuerdo de 2019 ya incluía beneficios arancelarios y cupos para productos agroindustriales como carnes, miel, lácteos, frutas frescas y aceites vegetales. Se espera que las negociaciones en curso traigan más oportunidades para el sector agropecuario argentino, especialmente dado que el EFTA otorga una mayor protección a su sector agrícola en comparación con la Unión Europea.
Argentina ya tiene una considerable presencia en el mercado del EFTA sin un acuerdo específico, siendo responsable del 26% de las importaciones de carne de caballo de Suiza, el 24% de los jugos cítricos y el 20% de las pieles. Además, es el principal proveedor de maní sin cáscara para Noruega y un importante exportador de pescados y calamares congelados a Islandia.
Con un PIB per cápita casi tres veces superior al de Argentina, el EFTA representa una oportunidad atractiva para diversificar y aumentar las exportaciones argentinas. Mientras tanto, otros países de América Latina, como México, Chile y Perú, han firmado acuerdos de libre comercio con este bloque, que también está expandiendo su influencia global mediante acuerdos en África, Medio Oriente y Asia-Pacífico. El futuro se presenta optimista para Argentina, ya que un acuerdo de libre comercio con el EFTA podría consolidar y expandir sus exportaciones, abriendo nuevas puertas hacia mercados internacionales
Redacción con información de Infobae