Milei celebra un año de sacrificios y anticipa: "Vienen tiempos felices tras un año de sacrificio"

 

Acompañado por todo su Gabinete, incluido el titular de ministros, Guillermo Francos, y su hermana Karina Milei, el mandatario realizó un exhaustivo balance de los desafíos enfrentados en los últimos doce meses. Subrayó que el país está más cerca de que la inflación sea "poco más que un mal recuerdo". Milei también destacó que, gracias a las políticas implementadas, en 2025 se verá "un crecimiento sostenido" basado en las bases macroeconómicas establecidas durante su gestión.

 

En su crítica al pasado, el presidente mencionó que un año atrás, un "degenerado fiscal" (refiriéndose a Sergio Massa) había dejado un legado de emisión monetaria irresponsable. "Hoy la emisión monetaria es cosa del pasado", recalcó, haciendo hincapié en que su administración ha logrado estabilizar la economía y evitar una catástrofe.

 

El primer mandatario destacó una serie de reformas implementadas durante su mandato. Entre ellas, mencionó la desregulación del transporte terrestre, la eliminación de los precios máximos, la derogación de la ley de Góndolas y la habilitación de Internet satelital. Afirmó que su "reforma estructural" es "ocho veces más grande que la de Carlos Menem", lo que refleja su ambición de llevar a cabo cambios significativos en la economía argentina.

 

En un mensaje claro sobre sus intenciones futuras, anunció que está "cada día más cerca" de eliminar el cepo cambiario, una medida que calificó de "aberración". "Con nosotros se va a terminar el año que viene y para siempre", aseguró.

 

Uno de los puntos más destacados de su discurso fue el anuncio de una "motosierra profunda" para reducir el gasto público. Milei se comprometió a realizar una "auditoría inclemente" que permitirá achicar el Estado, eliminando organismos, secretarías, subsecretarías y empresas públicas que, en su opinión, no deberían existir. "Cada atribución o tarea que no corresponda a lo que se supone que tiene que hacer el Estado nacional será eliminada", detalló.

 

Además, el presidente se comprometió a implementar reformas en distintas áreas: impositiva, previsional, laboral, de seguridad nacional, penal y política. "Vamos a reducir en un 90 por ciento la cantidad de impuestos nacionales", prometió, buscando aliviar la carga fiscal sobre los ciudadanos.

 

En un esfuerzo por aumentar la competitividad económica, Milei propuso un esquema de competencia que permita a los argentinos realizar transacciones en la moneda que deseen, excluyendo el pago de impuestos, que continuará realizándose en pesos. Esta medida tiene como objetivo fomentar la libertad económica y facilitar el comercio.

 

El presidente también anticipó su intención de buscar un tratado de libre comercio con Estados Unidos y promover reformas para otorgar autonomía a los países del Mercosur. "Eliminaremos las trabas arancelarias que dificultan el libre comercio interno y reduciremos el arancel externo común", anunció, subrayando que estas acciones buscarán beneficiar a todos los argentinos.

 

Concluyó su discurso afirmando que su administración "vino a terminar con el régimen de privilegio que convirtió a los argentinos de bien en ciudadanos de segunda". "Llegó la hora del hombre común", sentenció, reafirmando su compromiso de trabajar por un país más justo y equitativo.

 

Su discurso, en la antesala de un año electoral, dejó en claro que su gobierno continuará enfocándose en el ajuste y en la reestructuración del Estado, posicionándose como un firme defensor de las políticas de desregulación y de una economía más libre.

 

Redacción